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Historias
Rouge
CapÃtulo 1.
- Hola. -Dijo con una voz firme y desgastada.
- Hola... -Susurré sin ganas.
- ¿Por qué me estás llamando? -Preguntó a pesar de saber cual serÃa la respuesta.
- Necesitaba escuchar tu voz antes de marcharme...
- ¿Marcharte? -Me interrumpió.
- Si, me marcho un tiempo. Necesito olvidarme de algunas cosas.
El silencio ocupó varios segundos vacÃando mi cabeza de todos los pensamientos que la inundaban. Mike colgó. Tras varios segundos colgué yo también, sabÃa que no estarÃa de acuerdo pero creà que por lo menos me escucharÃa. Él sabÃa que no le buscaba a menudo pero que cuando lo hacÃa era porque de verdad le necesitaba, pero tras esa reacción tiró todos los buenos recuerdos transformándolos en errores. Irme era lo mejor, lo mejor que podÃa hacer. Olvidar todo lo que pasamos, lo que hicimos mal y lo que sufrimos. Me dejé caer en el sillón mientras veÃa como se desvanecÃa la que habia sido mi vida para empezar de cero. Sonó el timbre. No tenÃa ganas de ver ni hablar con nadie asà que continué sentada en el sillón. Dos minutos después llegó un mensaje a mi móvil. "¿Esque no piensas abrirme nunca? -Mike" Me levanté inmediatamente y volvà a leer el mensaje. Increible. Después de todo, él estaba en mi puerta. Abrà y ahà estaba Mike, más guapo que nunca. Como siempre, su pelo estaba despeinado, su piel se habÃa oscuercido y eso resaltaba sus ojos, esos ojos azules en los que yo me perdÃa...
Esbozó una perfecta sonrisa mientras la mia seguÃa descolocada. Dejé mi mirada fija en su sonrisa y no pude evitar que se me escapase la mÃa. Cuando me disponÃa a hablar me abrazó. Lo hizo como si no quisiese que me fuera, como si no quisiese soltarme nunca. Unos cuantos cafés después, hablando sobre cosas que a ninguno de los dos nos interesaban realmente, nos callamos. Levantó la cabeza y me miró a los ojos.
- ¿Es verdad que pensabas marcharte?
- Si... creo que es lo mejor para los dos. -Tras la visita ya no estaba segura de que quisiera hacerlo, en verdad... no estaba segura ya de nada.
- Al, estoy aqui. ¿Eso no cambia las cosas?
- Mike no puedes hacer esto, no ahora. Yo tenÃa las cosas tan claras...
- Lo siento pero no puedo permitir que te vayas. Los muchos errores que hemos cometido no tienen por qué acabar con esto. No cuando ninguno de los dos queremos hacerlo. Al, no puedo evitar querer estar contigo. Necesito volver a levantarme con tus sonrisas y con tus buenos dias a besos, con tus prisas por comerme, con tu olor en cada camisa...
No me salÃan las palabras, estaba impresionada. Mike nunca habia sido asÃ, nunca habia dicho lo que sentÃa.
- ¿Al? Me giré y estaba mirandome fijamente, supongo que esperaba una respuesta, algo a lo que agarrarse tras mostrar que tenÃa sentimientos. Eso que él siempre habÃa intentado esquivar. HabÃa conseguido requebrajar todos mis planes en tan solo treinta segundos de conversación. Necesitaba pensarlo, yo sabÃa lo que querÃa pero no serÃa lo correcto. Un mensaje llegó a mi móvil. Me abalancé sin pensarlo, tenÃa que retrasar la situación. "¿Dónde te metes? Llevo intentando localizarte varios dÃas... Llámame cuando tengas tiempo. -Clod"
- Es importante, tengo que llamar... Luego hablamos Mike. -Respondà intentando huÃr de esa conversación.
- ¡Alison!
- Luego te llamaré, lo juro. -Dije con una sonrisa.
Salió dando un portazo. Suspiré aliviada y le envié un mensaje a Clod. "Te echaba de menos. ¿Comemos juntas? -Al" HacÃa mucho que no la veÃa ni hablaba con ella. Un par de minutos después me contestó. "¡Ya era hora! Vegetariano en treinta minutos. ¿Te ves capáz? -Clod"
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